Gracias a esta interesante iniciativa he podido disfrutar de una estupenda ( y gélida) clase de arte (el aprendizaje como herramienta artísitica) sentada en el suelo de Plaza de España rodeada del calor de un montón de ( personas)
He podido adentrarme un poco en ese maravilloso mundo del arte, que según he aprendido, se asemeja al del equilibrista, porque cada paso que da el artista, es como cuando el equilibrista se sube a una cuerda, tiene que demostrarse a si mismo que es capaz de permancer en ella.
En esos equilibrios estamos estos días en sanidad.
La universidad hoy me ha demostrado un nivel de creatividad mayor. Un paso adelante en su revindicación, en su formulación de la protesta, en su forma de hacer, con visión a medio plazo.
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