- El mundo es eso – reveló -.
Un montón de gente, un mar de fuegultos.
Cada persona brilla con luz propia entre todas las demás.
No hay dos fuegos iguales.
Hay fuegos grandes y fuegos chicos y fuegos de todos los colores.
Hay gente de fuego sereno,
que ni se entera del viento,
y gente de fuego loco,
que llena el aire de chispas.
Algunos fuegos
, fuegos bobos,
no alumbran
ni queman;
pero otros arden la vida con tantas ganas que no se puede mirarlos sin parpadear, y quien se acerca, se enciende.
No hay comentarios:
Publicar un comentario